“He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:20). “Un padre y su hija de diez años pasaban sus vacaciones a la orilla del mar. Un día salieron a disfrutar de un baño en el mar y, aunque ambos eran buenos nadadores, a cierta distancia de la orilla se separaron. El padre, al darse cuenta de que la marea los estaba adentrando al mar, le gritó a su hija: ‘¡María, voy a la playa a buscar ayuda. Si te cansas, ponte de espalda. Puedes flotar todo el día de esa manera. Volveré por ti!’ “En poco tiempo, había muchos buscadores y botes que recorrían la superficie del agua en busca de la niñita. Pasaron cuatro horas antes de que la encontraran, lejos de la costa, pero flotaba tranquilamente sobre su espalda y no estaba para nada asustada. Con aplausos y lágrimas de alegría y alivio, recibieron a los rescatistas cuando regresaron a tierra con su preciosa carga, pero la niña se tomó todo con calma. Ella dijo: ‘Papá dijo que podía flotar todo el día sobre mi espal
Un espacio con sermones que procuran fortalecer la fe y la esperanza en Jesús.