La historia es su historia Algunas personas ganan mucho dinero pretendiendo ser alguien que no son. Actores y actrices que pretenden ser otra persona, son recompensados con fama y fortuna. Algunas personas también pretenden ser alguién, o algo que no son, incluso sin ser actores del cine. Ellos son criminales. Engañan a las personas en general, roban dinero, fingiendo ser lo que no son. Pero cuando las autoridades los agarran, son llevados a prisión. Espías también pretenden ser otra persona. Pretenden ser leales a la patria; pero venden su lealtad a otro país. Todos los países del mundo tienen personas famosas: actores, músicos, dirigentes políticos que el público ama y admira. En la Argentina, una de esas personas famosas fue Evita Perón. Los argentinos amaban a Evita Perón; ella murió muy joven y toda la nación lloró. En su memoria muchas mujeres se peinaban y vestían como ella lo hacía. En los EE UU, el cantante Elvis Presley se convirtió tan famoso que hoy, muchos a
Un espacio con sermones que procuran fortalecer la fe y la esperanza en Jesús.