INTRODUCCIÓN Miriam, la hija de 20 años de Bin Laden, subió la escalera corriendo hasta la pieza del líder de Al-Qaeda y le preguntó qué estaba sucediendo. “Baja y vuelve a tu cama”, le dijo Bin Laden. Hace más de cinco años que se escondía en ese complejo de cuatro pisos que, en algunos aspectos, se parecía más a una cárcel de máxima seguridad. El lugar tenía cerca de 4.000 m2, donde había un rebaño de vacas, un gran gallinero y un rebaño de ovejas que la familia criaba dentro de la propiedad, además de una huerta donde cultivaban todo lo que comían aquellos que vivían al lado del hombre más buscado del mundo. Estados Unidos había perseguido a Bin Laden durante diez años, y a inicio del 2011, fuentes de espionaje militar informaron que el líder de Al-Qaeda vivía en Abbottabad, en Paquistán, desde hacía algunos años. En un estante de uno de los cuartos, estaban algunas de las armas que habían acompañado a Bin Laden en aquellos diez años de fuga, pero mist
Un espacio con sermones que procuran fortalecer la fe y la esperanza en Jesús.