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Mostrando las entradas con la etiqueta Jacob

Dos hermanos, dos elecciones

DOS HERMANOS DOS ELECCIONES Introducción De todos es conocida la historia de Jacob y Esaú. Para algunos la acción de Esaú fue predestinada por el eterno. Pero la palabra de Dios nos asegura que solo hay una predestinación: Efesios 1:3-6, 11,12 ¿Qué pasó? ¿Por qué al final estos dos hermanos tuvieron un fin tan diferente? I. No hubo elección arbitraria de parte de Dios “Patriarcas y profetas Pág. 207 dice: “No hubo una elección arbitraria de parte de Dios por las cuales Esaú fuese excluido de las bendiciones de la salvación. Los dones de su gracia mediante Cristo son gratuitos para todos. No hay elección excepto la propia, por la cual alguien haya de perecer. Dios ha expuesto en su palabra las condiciones de acuerdo con las cuales se elegirá a cada alma para la vida eterna: La obediencia a sus mandamientos mediante la fe en Cristo. Comentario Bíblico Adventista, Tomo I Pág. 381 nos dice que Dios conocía en su presciencia (conocer de manera anticipada) los caracteres respecti

Escalera al Cielo - Una novela de amor infinito!

Escalera al Cielo - ¡Una novela de amor infinito! - La vida de Jacob "Pero el que beba del agua que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un manantial del que brotará vida eterna." Juan 4:14 “Tú, pues, vuélvete a tu Dios; guarda misericordia y juicio, y en tu Dios confía siempre” (Oseas 12:6) Jacob no salió bien de su casa Odiado por su hermano y bajo amenaza de muerte; Jacob no tuvo más opción: Tenía que salir de su casa. Tal vez, lo que él no sabía es que, el primer lugar por donde iba a pasar, sería la casa de Dios: BETEL "La noche del segundo día lo encontró lejos de las tiendas de su padre. Se sentía desechado, y sabía que toda esta tribulación había venido sobre él por su proceder erróneo. Las tinieblas de la desesperación oprimían su alma, y apenas se atrevía a orar. Sin embargo, estaba tan completamente solo que sentía como nunca antes la necesidad de la protección de Dios. Llorando y con profu