INTRODUCCIÓN
¿Quién no se deslumbró, lejos de las luces de la ciudad, al mirar las estrellas que brillan intensamente en el cielo en una noche sin nu- bes, especialmente por su cantidad incalculable?
Sin embargo, hasta en la noche con cielo más limpio, cuando logramos ver más estrellas de las que podríamos contar antes que el sol matinal las hiciera desaparecer, es poco lo que observamos en con- traste con lo que en realidad existe en el espacio.
Se estima que pude haber hasta dos trillones de galaxias en toda la creación. ¡Trillones! Y los números van aumentando.
a. Cada galaxia cuenta con un promedio de 100 mil millones de estrellas.
b. Cien mil millones de veces dos trillones son en total incontables estrellas.
c. O sea, existen más estrellas que todos los granos de arena de las playas de todo el mundo.
En las últimas décadas, los astrónomos han descubierto lo que llaman “exoplanetas”. Son planetas que orbitan sus estrellas, así como lo hacen los planetas del Sistema Solar alrededor del sol, nuestra estrella.
De acuerdo con la NASA, ya fueron descubiertos cerca de cuatro mil exoplanetas.
Si el número de exoplanetas fuera similar al número de estrellas, o de galaxias (o sea, si hubiera solo un exoplaneta por galaxia), el Universo tiene más planetas de lo que somos capaces de imaginar.
¿QUÉ SIGNIFICA ESO?
Que la posibilidad de estar solos en el Universo es muy pequeña, y que pueden existir otras formas de vida en la inimaginable inmensidad cósmica.
Existe hasta una organización creada inicialmente por la NASA denominada SETI, Search for Extraterrestrial Intelligence [En busca de inteligencia extraterrestre], dedicada a descubrir vida en otras partes de la creación, además de la Tierra.
La ironía es que los dedicados trabajadores de la SETI hacen búsquedas por el cielo con sus equipos sofisticados con la esperanza de recibir un tweet cósmico o cualquier otra forma de comunicación de alguna parte del Universo. La Biblia, que fue escrita hace miles de años, no solo habla sobre la existencia de vida fuera de la tierra, sino también nos da alguna idea en cuanto al carácter moral de esos seres, o por lo menos de parte de ellos.
El texto sagrado nos revela lo que el sentido común también nos indica: no estamos solos en todo este vasto Universo.
DESARROLLO
Vistazos de lo desconocido
Hay registrados pasajes bíblicos sobre la vida existente en otras partes de la creación:
a. “Para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales” (Efesios 3:10).
Principados y potestades... ¿de dónde? De las regiones celestiales, o sea, de otras partes de la creación, además de la Tierra.
Y todavía más fascinante es constatar que de acuerdo con ese texto esos principados y potestades reciben la información de Dios sobre lo que sucede aquí en la Tierra con su iglesia.
b. Otro pasaje: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12)
Esa es una vislumbre de que hasta ahora la SETI no llegó ni cerca de un descubrimiento.
El texto habla de “nuestra lucha”, ¿contra quién?
Contra las fuerzas espirituales del mal en las regiones celestiales, contra ellas.
Los despliegues de ese versículo, junto con otros, son asombrosos.
No solo existen otras formas de vida en el Universo, sino que también algunas de ellas son malas. Y ese mal está trabajando contra nosotros en la Tierra.
c. Un texto bíblico más: “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él” (Colosenses 1:16).
• Aquí la Biblia está hablando sobre Jesús como el Creador de todas las cosas (cf. Juan 1:1-3), tanto en la tierra como en el Cielo, “las visibles y las invisibles”.
El conflicto cósmico
a. Algunas porciones del libro de Apocalipsis destacan más esa idea:
• “Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él. [...] Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los morado- res de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo” (Apocalipsis 12:7-12).
b. ¿Qué está diciendo la Biblia?
En primer lugar, no estamos solos en el cosmos.
Existen otras formas inteligentes de vida.
Una vez más, teniendo en cuenta el tamaño del Universo y todas las estrellas que contiene, eso no debería sorprendernos.
Nos tendría que asombrar que no existieran otras formas de vida.
En segundo lugar, algunas de esas formas de vida son hostiles, son malas e introdujeron el mal en esta Tierra. Se “declaró la guerra en el Cielo” y algunos de los combatientes están aquí ¿debería sorprendernos que también existieran tantos conflictos aquí en la Tierra?
Lo que revelan esos versículos y otros semejantes es lo que se llama el conflicto cósmico, un enfrentamiento entre el bien y el mal y que, aunque comenzó en otra parte de la creación, se ha desarrollado aquí en la Tierra.
¿Cómo llegó el mal a la Tierra?
a. Lucifer era un ser celestial, un ángel creado por Dios.
b. ¿Y cómo lo creó Dios?
“Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado”. ¿Perfecto? ¿Qué sucedió con ese ser perfecto? “Hasta que se halló en ti maldad” (Ezequiel 28:14, 15).
c. ¿Cómo se encontró iniquidad en un ser “perfecto” creado por Dios?
d. ¿Cómo pudo suceder eso?
Porque esa perfección incluía libertad, libertad moral, que Lucifer violó.
El mismo principio se aplica en el mundo.
Génesis 1 y 2 revelan a Dios creando vida en la Tierra, lo que incluyó a Adán y Eva, ambos creados a imagen de Dios.
“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó” (Génesis 1:27). Cuando concluyó la creación, Dios mismo dijo que era muy buena (vers. 31).
Génesis 3 revela que, por el engaño de la “serpiente” (v. 1-6), esos seres perfectos cayeron en pecado.
Pecado es más que un error, un acto, es un estado de separación de Dios.
Sucedió porque su perfección incluía la capacidad de amar.
El amor requiere libertad, y eso significa la posibilidad de elegir el camino equivocado.
Mal, rebelión y guerra, todo comenzó en el Cielo, en el Cielo perfecto de Dios, y provocó la caída de Lucifer.
Luego, Lucifer, ahora llamado Diablo y Satanás, vino a la Tierra y trajo su rebelión bajo el disfraz de la antigua serpiente (cf. Génesis 3:1-6).
¿Qué hizo Dios?
a. ¿Pero no podría Dios haber impedido que todo eso sucediera desde el principio?
Él pudo haber creado seres humanos sin la capacidad de amar.
Podría haber hecho una raza de robots que pudieran hacer todo y no tendrían la posibilidad de amar.
Pero Dios quiso una relación fundamentada en el amor y, si nos hubiera hecho robots, eso no sería posible. No podríamos amarlo de la misma forma que una heladera es in- capaz de retribuir amor a su dueña.
O tal vez podría haber eliminado a Lucifer en el momento en que este comenzó su rebelión.
Sin embargo, esa opción también tuvo una función.
Supongamos que usted es un líder amable y cuidadoso con su grupo.
Entonces, por algún motivo totalmente injusto, una persona comienza una rebelión en la que lo acusa de ser malo, egoísta, arbitrario y dictador.
Como una reacción antes de un juicio, antes de permitir que presenten el caso en su presencia y delante de otros, usted los pone en hilera y los fusila. De esta forma, habrá acabado con la rebelión.
¿Y las acusaciones que le harían a usted?
Sus actos habrían probado exactamente las quejas hechas contra su persona.
Usted sería realmente malo, egoísta, arbitrario y dictador.
Si usted fuera un líder malo que gobernara por el miedo y por amenazas, simplemente asustaría a las personas y las haría obedecer por miedo.
Las Escrituras enseñan que el Señor es un Dios de amor.
Él actúa por amor, no por miedo.
“Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él” (1 Juan 4:16).
Cuando le preguntaron a Jesús qué mandamiento era el más im- portante, respondió: “Y amarás al Señor tu Dios con todo tu co- razón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento” (Marcos 12:30). Dios puede ordenar que lo amemos, pero no puede forzarnos.
Para amarlo, necesitamos ser libres.
CONCLUSIÓN
Por lo tanto al ser un Dios de amor ¿podría resolver el gran conflicto sin violar el principio del amor?
Imagine un líder acusado por rebeldes de ser malo, egoísta, arbitrario y dictador.
Suponga que ese líder, aun en la posición de liderazgo, descendiera al nivel de su pueblo, viviera en medio de sus súbditos, sufriera en medio de ellos y hasta sacrificara su vida por ellos, mostrando que las acusaciones que le presentaron eran lo opuesto a quien realmente es.
Además, ¿si los que hicieron las acusaciones contra él fueran los mismos que lo mataron, probando que en verdad ellos eran los culpables de lo que acusaban a su líder?
Aunque sea solo una analogía, de manera bastante general, eso fue lo que sucedió con Jesús de Nazaret, el Cristo en la cruz.
Allí, Dios encarnado respondió a las acusaciones de Satanás. Cristo asumió la humanidad, y por medio de esa humanidad reveló a los ángeles y al mundo quién es Dios realmente.
Mientras el conflicto cósmico todavía se mantiene, la ruina de Satanás es segura.
“Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo” (Apocalipsis 12:12).
LLAMADO
Estamos llegando al momento final de la historia de este mundo.
Dios quiere poner punto final a todo el mal y así darnos una vida eterna y perfecta.
Usted recibió una tarjeta de decisión y, en este momento, quiero invitarlo a completarla.
La vida tiene un sentido, una razón y usted solo estará completo cuando esté en los brazos de Jesús.
Dios le está hablando ahora...
¿Quiere entregarse a ese Dios de amor?
¿Quiere ser parte del pueblo fiel al Señor?
Si ese es su deseo quiero invitarlo a llenar la primera tarjeta con su decisión.
Comentarios
Publicar un comentario