Aprendiendo a ser Pacientes - Serie Creciendo en Cristo

"Vosotros también poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe, virtud, a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; al afecto fraternal, amor." 2 Pedro 1:5-7

Ahora entramos en un campo muy amplio, la paciencia.

Luego del dominio propio, el apóstol Pedro nos insta a procurar el siguiente escalón, porque:

"Con paciencia llegamos más lejos"

Una de las cualidades cristianas más destacables es la paciencia.

Es verdad, a nadie le gusta ser paciente, ni esperar.

Con justa razón, cuando una persona es internada en el hospital se le llama "paciente". Porque para recibir un tratamiento completo la persona debe esperar. La recuperación siempre lleva tiempo, y a veces, demora más de lo que se piensa.

Hoy analizaremos las historias de Job y de Noé. Hombres que, a través de la paciencia, superaron toda incredulidad.

Agotaron mi Paciencia

Es muy común escuchar esta frase: "Agotaron mi Paciencia".  

La Biblia menciona en Lucas 18:5 un juez que era presionado día y noche por una mujer viuda que dijo:

"Sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia"

La paciencia se agota con las presiones de todos los días, el correteo diario y las múltiples tareas y obligaciones que tenemos.

Un tiempo atrás cuando estaba con muchas cosas para hacer, quedé con el pie enyesado. Al inicio me dio mucha rabia y tristeza porque tenía tantas cosas para hacer y justo en ese momento, sin que nadie lo espere, un accidente que me imposibilito caminar y seguir con todas mis actividades.

Sabe, a veces, Dios nos da una frenada en nuestra vida: un Alto, Un Stop. No se sienta mal y que no se le agote la paciencia porque Dios nos esta ayudando a crecer en ella (la paciencia).

Pruebas Vs Promesas - La Paciencia de Job

Hay dos cosas que te definen: Tu Paciencia cuando no tienes nada y tu actitud cuando lo tienes todo.

La vida es simple y a la vez compleja, sin embargo necesitamos tener paciencia para alcanzar todo aquello que Dios nos ha prometido.

Hebreos 6:11 y 12 dice:
"Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza, a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas."

Y Hebreos 6:13 al 15 agrega:
"Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo, diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente. Y habiendo esperado con paciencia, alcanzó la promesa."

Aquí Dios dice: Hijo mío, no te estoy diciendo que será fácil, pero te estoy diciendo que valdrá la pena.

En Santiago 5: 10 y 11 nos menciona un personaje que atravesó esa lucha; entre soportar las pruebas y luchar por alcanzar las promesas de Dios. El pasaje dice: 

"Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor. He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo."

Job cuyo nombre significa "Aquel que sufre penalidades" fue probado severamente.

Vamos a recordar un poco de su historia

"En la región de Uz había un hombre recto e intachabale, que temía a Dios y vivía apartado del mal. Este hombre se llamaba Job. Tenía 7 hijos y 3 hijas, era dueño de 7000 ovejas, 3000 camellos, 500 yuntas de bueyes y 500 asnas, y su servidumbre era muy numerosa. Entre todos los habitantes del oriente era el personaje de mayor renombre"

Pero, la desgracia no tiene horario.
En menos de 5 minutos lo perdió todo. Luego, perdió también su salud; quedando gravemente enfermo, su esposa le decía: Maldice a Dios y muérete.

Sus amigos (Grandes explicólogos) le decían: Seguro tenías algún pecado oculto, por eso te pasa todo esto.

Job decía:

"¿Cuál es mi fuerza para esperar aún? ¿Y cuál mi fin para que aún tenga paciencia?" Job 6:11

La NVI dice "¿Qué fuerzas me quedan para seguir esperando? ¿Qué fin me espera para querer vivir?

Dicen que: Paciencia no es la habilidad de esperar, sino la capacidad de mantener una buena actitud mientras esperas.

El apóstol Pablo nos anima a mantener nuestra actitud en alto, incluso en medio de las tribulaciones. Nos dice en Romanos 5:3

"Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza"

Apreciado hermano, aunque la vida sea cruda soporta un poco más, espera un poco más, confía un poco más ¡Dios siempre vendrá en nuestra ayuda!

Hebreos 10: 35 al 39 dice: "No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. 

"Porque aún un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará. Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma."

La vida de Job fue transformada y toda su fe fue fortalecida. Su historia no había terminado. Cuando vemos el final, vemos que con paciencia alcanzó la promesa. Dios, volcó toda su historia:

"El Señor bendijo más los últimos años de Job que los primeros, pues llegó a tener 14000 ovejas, 6000 camellos, 1000 yuntas de bueyes y 1000 asnas. Tuvo también 14 hijos y 3 hijas. A la primera de ellas le puso por nombre Paloma, a la segunda la llamó Canela, y a la tercera Linda. No había en todo el país mujeres tan bellas como las hijas de Job. Su padre les dejó una herencia, lo mismo que a sus hermanos. Después de estos sucesos Job vivió 140 años. Llegó a ver a sus hijos, y a los hijos de sus hijos, hasta la cuarta generación. Disfrutó de una larga vida y murió en plena ancianidad" Job 42:12-17

Job se mantuvo apegado a Dios cuando no tenía nada y cuando tuvo todo; su actitud lo llevó a depender aún más del Señor.

La historia de Job es apenas un ejemplo, de aquellos que pasaron severas pruebas, aceptaron con paciencia la voluntad de Dios en sus vidas y alcanzaron la promesa por la gracia infinita del Salvador.

Teniendo en cuenta tantas historias el apóstol Pablo nos anima en Hebreos 12:1 y 2:

"Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios."

Recuerde que si usted NO hace el tratamiento completo de una enfermedad, golpe u operación quedarán secuelas y dolores para el futuro; de igual manera, Dios quiere hacer una obra de transformación completa en nuestra vida: Física, Mental y Espiritual.

Por eso se nos dice en Santiago 1:2 al 4:

"Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna."

¡Sea paciente y permita que Dios restaure su vida!

¿Hasta cuándo? Cuando la justicia se hace esperar: Bienvenida sea la longanimidad

Problemas con otras personas también requieren paciencia. Será muy útil desarrollar la longanimidad. Longanimidad viene del latín Longus=Largo y ánimos= Ánimo. Significa entonces: Un ánimo largo. Aprendamos de Dios quien es longánimo por Excelencia:

Romanos 2:4 dice ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento?

Alguien dijo: todo problema complejo tiene una solución simple. Por eso, cuando atravesamos serios problemas o dificultades es bueno recordar que: "Perder la Paciencia es perder la batalla"

Creo que, en la gran mayoría de los casos, cuando hay problemas personales dentro de la familia, trabajo, iglesia la mejor respuesta es: ESPERAR.

En este proceso las palabras juegan un papel importante, de un lado y de otro:

Dice Proverbios 25:15:

"Con paciencia se convence al gobernante. ¡La lengua amable quebranta hasta los huesos!" ¡Las palabras suaves pueden quebrar los corazones más duros! 

Principalmente a quienes somos creyentes el apostol Pablo nos anima en Colosenses 1:10,11: 

"Para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad."

Recuerde: "El que se cansa, Pierde"
No podemos mostrar un comportamiento que no esté acorde con el amor y la paciencia de Cristo. O simplemente decir lo que se nos venga a la boca y punto.

Si las palabras pueden darnos la victoria o la derrota ¿No le parece que deberíamos considerar mejor cada palabra y usar un lenguaje que edifique?

Podemos rescatar preciosas lecciones de los casos que están en la Biblia:

Romanos 15:4 al 6 dice "Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza. Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo."

Entonces ¿Otros están hablando mal de usted? recuerde:

"Mas vale ser paciente que valiente, mas vale vencerse uno mismo que conquistar ciudades" Proverbios 16:32

Espere hasta cuando sea necesario, entienda que se obtiene el pollo incubando el huevo y no rompiéndolo para que se abra.

Principalmente en el hogar. No es valiente el primero que se va, sino quien permanece hasta el final. No se trata de una carrera de velocidad de 100 metros, sino de una maratón de 42 kilómetros. Necesitamos ser personas de largo aliento y de mucha paciencia.

La Paciencia con otros es amor, la paciencia consigo mismo es esperanza, la paciencia con Dios es fe.

Entonces ¿Hasta Cuándo?

No lo sabemos; sin embargo, no vamos a desistir de amar a Dios, servir a nuestra familia y congregarnos en la iglesia. Perder la paciencia es perder la batalla y quien se cansa, pierde.

Pidamos a Dios que una grande porción de longanimidad sea derramada sobre nuestra vida y decidamos ESPERAR que su maravilloso propósito se haga una realidad en nosotros:

"Porque sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes los aman, los que han sido llamados de acuerdo a su propósito" Romanos 8:28

Un Ministerio paciente

Paciencia es la fortaleza del débil y la impaciencia la debilidad del fuerte.

¡Noé entendía bien eso en la tierra de los gigantes!

El apóstol Pablo en 2 Corintios 6:4 al 10 dice:

"No damos a nadie ninguna ocasión de tropiezo, para que nuestro ministerio no sea vituperado; antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias; en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en desvelos, en ayunos; en pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor sincero, en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra; por honra y por deshonra, por mala fama y por buena fama; como engañadores, pero veraces; como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos; como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo."

La paciencia, la persistencia y la perseverancia son armas cruciales en la vida de un siervo de Dios. Paciencia es la virtud de quien soporta males o incomodidades sin renegar, ni quejarse.

En la tarea de llevar a las personas al arrepentimiento, Noé vio, tristemente, que el corazón de muchas personas se volvió de piedra.

Su bisabuelo Enoc había caminado con Dios y su abuelo Matusalén de igual manera.

Tuvo sus 3 hijos luego que Dios le dio la orden de comenzar a construir el arca.

Al inicio de la construcción muchos creyeron su mensaje, y ayudaron a acarrear los materiales; pero, a medida que fueron pasando los años, se fue quedando solo y finalmente, lo consideraron como un fanático fundamentalista religioso, que era solo un charlatán de maleficios y catástrofes.

Necesitamos estar preparados para los últimos días, que serán como los días antes del diluvio donde la gente comía, bebía y se entregaba a los placeres.

Noé, sí quería la salvación de las personas. El sentía amor por las almas, ninguna de aquellas ofensas disminuyó su tesón y fervor por aquellas personas. Todo ministro necesita tener amor por las almas. Amor por las personas a quienes ha sido llamado a servir. Por eso, necesitamos, hoy, pedir el Espíritu Santo de Dios.

Gálatas 5:22 dice: "Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza. Contra tales cosas no hay ley"

1 Timoteo 6: 11 al 14 agrega:

"Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos. Te mando delante de Dios, que da vida a todas las cosas, y de Jesucristo, que dio testimonio de la buena profesión delante de Poncio Pilato, que guardes el mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro Señor Jesucristo."

Sin duda alguna, mientras más duros los corazones, más pacientes y tolerantes debemos ser.

Recuerde: Servir a Dios requiere de cada ministro mucha paciencia.

Tito 2:2 dice: "Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia."

Noé predicó 120 años y solo se convirtieron 7 personas quienes fueron; su esposa, sus 3 hijos y sus 3 nueras.

Increíblemente, cuando la puerta del arca se cerró (7 días antes del diluvio) las personas no se arrepintieron; sino, la gente se agolpó alrededor del arca e intentaron desbaratarla.

¿Ya hubo alguien que intentó desbaratar su ministerio todo?

El arca había sido tan sólidamente edificada, que no pudieron hacer nada contra ella; sin embargo, adentro de ella, Noé y su familia clamaban a Dios con gemidos indecibles.

Finalmente, el diluvio vino y toda aquella generación se perdió.

En cada golpe de martillo, se sentía un nuevo llamado de Dios a todos los hombres. Hasta que ese llamado se dejó de escuchar.

Amigos:
Que el mensaje sea rechazado, no nos debe llevar a la desesperación e impaciencia porque es Dios quien nos guiará y guardará hasta el final.

2 Timoteo 3: 10 al 12 dice:

"Pero tú has seguido mi doctrina, conducta, propósito, fe, longanimidad, amor, paciencia, persecuciones, padecimientos, como los que me sobrevinieron en Antioquía, en Iconio, en Listra; persecuciones que he sufrido, y de todas me ha librado el Señor. Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución."

Por eso dicen que: "Una hora de paciencia vale más que una hora de ayuno." Es decir: yo puedo ayunar y ayunar, pero si pierdo un segundo la paciencia, como en el caso de Moisés, la pérdida puede ser muy grande.

Sea paciente. Porque sin paciencia, corremos el riesgo de que el nombre de Dios sea vituperado; y corremos el riesgo de perder el ministerio que Dios nos ha encomendado.

El mensaje de Dios debe seguir siendo dado al mundo, pese a los chismes, murmuraciones, malas intenciones, amenazas, persecuciones y oposición; pero, con mucha paciencia, sabiendo que Dios obrará en el momento indicado.

2 Timoteo 4: 1 y 2 dice: "Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina."

Apacentar el rebaño del Señor requiere paciencia, las ovejas no sobrevivirán si se las maneja a palos todo el tiempo.

Paciencia es un valor que necesitamos con urgencia en nuestro ministerio.

Noé, pregonero de justicia, fue probado hasta lo sumo por las personas a quienes predicó el mensaje de Dios. Ser paciente lo hizo más fuerte que todos aquellos gigantes que, por su impaciencia, intolerancia y dureza de corazón no supieron que, el juicio de Dios ya estaba en camino.

No desista, sea paciente y persistente, siga sirviendo con amor porque Cristo viene pronto.

Pidamos a Dios que nos ayude, para que nuestro ministerio lleve las marcas del amor de Cristo y el sello de un servicio paciente y voluntarioso.

La paciencia de los Santos, Los que esperan su venida, Una iglesia de Esperanza

Dicen que la paciencia es amarga pero su fruto es dulce.

La Biblia nos muestra que un día todo pasará. Un día adoraremos todos juntos frente al trono de Dios.
Nos dice en Apocalipsis 5:11,12:

"Miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, de los seres vivientes y de los ancianos. Su número era millones de millones, y decían a gran voz:"El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza."

Y, hablando sobre Jesús en ese día, Isaías 53:11,12 agrega:
"Verá el fruto de la aflicción de su alma y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará sobre sí las iniquidades de ellos. Por tanto yo le daré parte con los grandes, y con los poderosos repartirá el botín; por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos y orado por los transgresores"

Lo bueno siempre se hace esperar, los hijos de Dios debemos ser pacientes porque la recompensa será muy grande.

Qué bueno es ver una iglesia donde los miembros son pacientes unos con otros. El apóstol Pablo se alegra por  una iglesia así en 2 Tesalonicenses 1:3,4:

"Debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, hermanos, como es digno, por cuanto vuestra fe va creciendo, y el amor de todos y cada uno de vosotros abunda para con los demás; tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis."

Y agrega en Romanos 8:25:

"Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos"

No existe paciencia en el aislamiento. Dios nos exhorta a ser humildes en el cuerpo de Cristo.
Efesios 4:1,2 dice:

"Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor"

Incluso, cuando el límite de la paciencia ha sido sobrepasado; existe un recurso aún más poderoso; EL PERDÓN.

Colosenses 3:12-14 dice: "Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto."

Si alguien le ofendió: PERDONE.

Ningún precio se compara a la gigante recompensa que recibiremos en la patria celestial. No vale la pena perder el cielo por un enojo o un segundo de impaciencia.

Mucha gente se aparta hoy del camino de Dios y de la iglesia por causa de una palabra, un comentario o un disgusto con otro miembro de iglesia; mas Dios, nunca nos prometió un camino de rosas, sino un camino angosto.

Imagine a Noé dentro del arca un año entero:

Los gritos de los animales, los olores, el poco descanso, la fatiga de la espera. Con toda seguridad, no fue un hotel 5 estrellas; pero si fue lo suficientemente resistente para salvarlos del diluvio.

Cuando salió del arca, Noé, lo primero que hizo fue adorar al Señor con lo poco que le quedaba.

La Biblia dice que esa ofrenda fue un olor tan agradable para Dios; que el Señor decidió hacer un pacto con Noé y toda la humanidad: Colocó el Arco iris en las nubes.

Cuando Jesús vuelva, un Arco iris estará alrededor de su trono; veremos su pacto eterno cumplido.

Santiago 5:7 y 8 dice: "Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca."

Cristo está volviendo, pero es paciente con nosotros porque quiere nuestra salvación.

2 Pedro 3:9 lo confirma: "El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento."

Ser una iglesia de Esperanza no significa que nuestra espera debe ser pasiva; necesitamos prepararnos y consagrar nuestra vida a la predicación del evangelio. Ser una iglesia viva y pujante; misionera hasta los huesos, sin temor ni vergüenza de dar a conocer a Jesús. Predicar el evangelio al mundo entero.

2 Pedro 3: 12 - 15 dice:

"Esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán! Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito."

Como a Noé, Dios nos guardará de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero.

Las ofensas y las palabras serán pequeñas, comparadas a la persecución y el decreto de muerte que sufrirán los hijos de Dios en los últimos días.

La paciencia será una característica de quienes serán salvos.

Apocalipsis 14:12 dice: "Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús."

Y Lucas 21:19 agrega: "Con vuestra paciencia ganaréis vuestras almas"

Tenga en cuenta también que, la impaciencia de otros, no tiene por qué destruir nuestra paciencia. Cada uno puede elegir seguir en esta carrera hasta el final.

Como el apóstol Pablo dice en 2 Timoteo 4:2:
"Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio. Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida."

"Baste decir que la decisión de Moisés para identificarse con su pueblo, la simiente prometida, lo involucró en riesgo personal, en conflicto espiritual y en sufrimiento en los años que siguieron. En un sentido muy real, él ejemplifica para todo el pueblo de Dios lo que inevitablemente implica el servicio espiritual efectivo. A los osados de todos los tiempos, la Escritura les enseña claramente que si ellos van a ser de algún valor para Dios, deben hacer una "decisión de fe" similar.

En verdad, habría una "zarza ardiente" de encuentro divino, que asegurara la fidelidad de Dios y su promesa de guía cuando fuera necesaria (Ex 3:1-6). ¡Pero también estaría la cruz! Uno piensa en Gedeón, en David, en Elías, en Daniel y en muchos otros. Aparentemente, si uno va a servir a su generación en la voluntad de Dios, no hay otra alternativa que correr el riesgo de una identificación personal y pública con Dios, con el pueblo de Dios y con la misión de Dios (missio dei) entre las naciones. Sólo entonces habrá un encuentro personal con Dios de maneras significativas. Incluso en el Antiguo Testamento uno es confrontado con el desafío de perder la vida en el servicio de Dios y ¡sólo entonces encontrarlo!" Glasser. El anuncio del reino, 79.

El testimonio del paciente Noé, cuyo nombre significa "Descanso" quedó grabado para todos nosotros. Hebreos 11:7 dice: 

"Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe"

No debemos desistir. Necesitamos ser pacientes unos con otros, solo así nos tornaremos una iglesia que vive la esperanza del retorno de Jesús todos los días; Tal vez las condiciones no sean las mejores; pero, solo siendo pacientes alcanzaremos la salvación.

Dios nos tiene Paciencia

"Por un breve momento te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias. Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu Redentor. Porque esto me será como en los días de Noé, cuando juré que nunca más las aguas de Noé pasarían sobre la tierra; así he jurado que no me enojaré contra ti, ni te reñiré. Porque los montes se moverán y los collados temblarán, pero no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz se quebrantará, dijo Jehová, el que tiene misericordia de ti." Isaías 54: 7-10

¿Cuánta paciencia ha tenido Dios con usted?

La paciencia de Dios nunca se agota. La Biblia cuenta de un hombre que le debía tanto a un rey, que ni trabajando muchas vidas podría pagarle.

Dice Mateo 18:26 dice: "Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo"

Aquel Señor le había perdonado toda la deuda.

Sin embargo aquel siervo, cuando salió del palacio del Rey, encontró un colega suyo que le debía muy poco; era solo cuestión de días para resolver esa deuda.

Su súplica está en Mateo 18:29:

"Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo."

La historia termina con un final triste: donde el perdonado, no perdonó y acabó siendo condenado.

Si Dios es tan paciente con usted ¿Está usted siendo paciente con otros?

Si Dios lo perdonó a usted ¿Está usted perdonando a otros?

Necesitamos ser pacientes frente a las pruebas de la vida.

Necesitamos ser pacientes frente a las injusticias de este mundo.

Necesitamos ser pacientes para tener un ministerio efectivo y feliz.

Y necesitamos ser pacientes en nuestra iglesia, para formar parte de los santos que adorarán a Dios por toda la eternidad.

Ilustración

Para que el sello deje en la cera una impresión clara y destacada, no lo aplican precipitadamente y con violencia, sino que con mucho cuidado lo ponen sobre la cera blanda, y pausadamente y con firmeza lo oprimen hasta que la cera se endurece. Así también traten con los seres humanos. El secreto del poder que tiene la influencia cristiana consiste en que ella es ejercida de continuo, y ello depende de la firmeza con que manifiesten el carácter de Cristo. Ayuden a los que han errado, hablándoles de lo que ustedes han experimentado. Muéstrenles cómo, cuando ustedes también cometieron faltas graves, la paciencia, la bondad y la ayuda de vuestros compañeros de trabajo les infundieron aliento y esperanza. – {CE 212.2}

 La carrera es larga, por favor nos desista y siga pidiendo al Señor por ese paciencia tan sublime, como la que tuvo nuestro Señor Jesús.

¡Dios te bendiga!

Comparto con ustedes las letras de una canción que es de mucha bendición.

Tenga la paciencia su obra completa en ti.
Que las pruebas y circunstancias no te alejen de mí.
Acércate, yo te quiero sanar,
No te voy a dejar, ni desamparar.
Porque yo estoy contigo hasta el final.

Delante del trono de gracia intercedo por ti
Si estás cansado y turbado acude a mi
Alegría y descanso yo te quiero dar
Una firme esperanza que tu vida guiará.
Paz verdadera y eterna en mi hallarás.

Mi vida en la cruz del Calvario entregue por ti
Venciendo el pecado y la muerte el camino te abrí.
Mi ley en tu corazón Yo pondré
Pues Yo soy el autor, consumador de tu fe
No desistas ya pronto, por ti volveré.
Amén.